(algunas de las intervenciones
más interesantes en el FORO CAFEXPAN:
3ª entrega, octubre 2006 /
enero 2007)
MY
DEAR STEWIE
EL ZURDO:
Justo en pleno delirio de hostilidades
con subcriaturas varias, a través de La Sexta (one more time: ya me regaló este
verano el viaje a Pocholandia), estoy adentrándome en una serie de dibujos,
FAMILY GUY, que en un principio me cayó algo gorda pero que me empieza a
fascinar por un personaje en concreto, el bebé maligno Stewie, parido con un
plano en la mano para desarrollar geoestrategias, de sexualidad compleja
(adorable cuando se traviste y se pinta los morritos de rouge), antiedípico
(siempre sueña con matar a su madre y usar a su padre, por quien sólo siente un
cierto desprecio, como escabel), con voz de adulto shakespeariano e
inteligencia superior. Según ese libro gordo de Petete llamado WIKIPEDIA,
Stewie surge como idea en la mente de su creador, de repetidas visiones de Rex
Harrison en MY FAIR LADY (yo apuntaría que el Rex Harrison de MUJERES EN
VENECIA también tiene algo que ver). Me trae recuerdos de mis dos villanos
favoritos de los Simpsons, Hank Scorpio y Sideshow Bob, siempre listos para
heredar la tierra, con ínfulas lovecraftianamente británicas, aunque Stewie ya
lo ansiaba desde el útero (donde actuaba como un Patton en proyecto fetal). El
auténtico mutante de nuestros tiempos post/columbine y la respuesta al cul de
sac de Wienerdog quitándose de en medio en PALINDROMES y de las subcriaturas
que babean nonsenses nihilistas/conformistas en las cloacas más bruttas de la
red. Stewie no se quita de en medio ni se degrada en las cloacas, sino que,
como heraldo del futuro salvaje que cada día se hace un poco más presente, está
aquí para quedarse y crecer, crecer, crecer.
Como las novelas de Ayn Rand y las
relecturas de HANNIBAL, Stewie me da ánimos para continuar un nuevo día
tranquilo y optimista.
Ayyy, miñiñooo, cuántotequierooo....
LAS CHISPAS Y EL FANGO
EL ZURDO:
Estas dos semanas he acompañado mis
comiditas con una megaescucha de los SPARKS. Disfrutando tanto de lo que ya
tenía (la trilogía KIMONO MY
HOUSE, PROPAGANDA e INDISCREET más el experimento con Giorgio Moroder THE
NUMBER ONE SONG IN THE HEAVEN) como de las muchas cosas que me pasó Charlie.
He quedado muy sorprendido del material último. Tras una larga etapa gris, con
hallazgos aislados y bastante rutina (entre los 80 y primeros 90), me encuentro con dos joyones, el
PLAGIARISM del 97 (donde se autoversionean con arreglos orquestales, bakalaeros
y hasta grungeros -deliciosas las dos versiones de su megaclásico ESTA CIUDAD
NO ES LO BASTANTE GRANDE PARA AMBOS, una teatral, con orquesta, y otra, rockera
machaca, con una voz colaborando que a mí me traía recuerdos del Beef del
FANTASMA DEL PARAISO, troquel indeleble de Gurruchaga-) y el cd del 2004, todo
orquestado y con guiños en las melodías a la New Age de Nyman y Mertens.
Oyendo estos trabajos, así como el del 2000, interesante pero menos por sus
arreglos básicamente bakala, he hallado la clave de varias historias
carpetovetónicas, como la idea de la Movida orquestal que se celebró al día
siguiente de nuestro paso por SIROCO, y también la enorme influencia de SPARKS
en FANGORIA (influencia, no hay que decirlo, pésimamente asimilada y
aprovechada).
De pronto, recuperé aquel escalofrío
erótico/estético que me producía el glam rock en los 70 y que me hizo pensar a
la sazón, ingenuo de mí, que la pluma era siempre sinónimo de mayor
inteligencia y sensibilidad. Hoy los SPARKS, el dontancredismo genial de Ron
Mael (aquí vilmente parodiado por Canut pero en desagradable y romo -ya saben,
aquello de la heroína y la metadona-) y la elegancia skinny de su hermano
Russell (pecoso y ambiguamente apetitoso, con una voz prodigiosa –aquí
contrapesado por la obesidad desagradable y blancuzca de Alaska, con esa voz
monótona y limitadamente saritísima-), me confirman algo que ya hace tiempo
sospechaba: obesidad y entropía van unidos.
Lo juncal se eleva. Lo obeso desciende.
Es una ley física también aplicable a la estética.
Sólo los rollizos de alma musculada, wellesiana, pueden redimirse. Pero hay tan pocos.....
···
MALEDETTO:
También es soberbia una versión
-ahora no recuerdo exactamente dónde se halla- de "This town
ain´t..." totalmente desnuda, sólo con piano y voz.
La influencia de Sparks tampoco
se deja notar o es pésimamente asimilada también en el ámbito internacional. En
una época de contagioso furor sparksiano, un amigo me regaló algo que creía me
gustaría y más bien me dieron ganas de vomitar... Se trataba de un insufrible
CD de Muse (mis disculpas a los fans que pueda haber de este conjunto en el
foro). Me pareció hinchado, aburrido e indigesto además de nulo en imaginación.
Me costó deshacerme del artefacto (¡creo que se lo regalé al ingrato de
Karpoff! El sí lo disfrutaría...).
Y yo no tengo nada contra lo
barroco. Más bien lo contrario. He disfrutado mucho con el último montaje de la
ópera maldita de Prokofiev en el Teatro Real, "El amor de las tres naranjas".
Y eso que salen hasta los Village People (también hay un acertadísimo guiño a
"Kill Bill"). Pero claro, lo recargado está perfectamente orquestado.
Hay gravísimas voces rusas que ponen orden en la mariconería y un castigo
a Fata Morgana por parte de un samurai sin compasión... Además de una
soberbia dirección musical.
Los guiños a la ominosa New Age
han sido bien distintos en el pop. Gente de escasas ideas como Blur
reivindicaron/samplearon a Nyman, a quien yo particularmente detesto. Sparks
hacen guiños más bien a Mertens. Yo francamente nunca he considerado a este
último carne de Ramón Trecet y sus acólitos. Recuerde, Maese Mueca, su adhesión
a la exquisitez belga Les Disques du Crépuscule junto a la divina Isabel
Antenna, entre otros. Nyman se toma demasiado en serio a sí mismo para que le
relacionen con el pop. Mertens ofreció un soberbio concierto en el año 90, más
cerca de Thelonius Monk y de los punks del jazz (como Keith
Jarrett deconstruyendo clasicismos) que de los asépticos fondos del Landscape
Channel. Además Wim Mertens es el aderezo sonoro del barroquismo extremo (e
ingrávido) del genial Peter Greenaway (quien debe andar últimamente un tanto
despistado al confiar en gente como Jordi Mollá).
Respecto a Nacho Canut, diré algo
en su favor. Creo que Canut posee un Mr. Hyde mil veces más interesante
que su faceta popular y fangoria. En proyectos como Intronautas -dignos
herederos de Los Vegetales- recurre a lo mejor que le dejó Berlanga (el
amor por los grupos de chicas de los sesenta, Phil Spector, el bubblegum, los
iconos 70´s...) y saca a relucir su lado menos Chueca: el ramoniano/surfero. Es
claramente la antítesis del petardeo fallidamente glam de Vaquerizo con
las Nancys. De hecho Canut declaró en uno de sus mejores pildorazos pop de los
90: "Barbie debe morir". Seguramente Sparks siguen siendo influencia
para él, pero es un guiño demasiado arty para el público zerolero. Sólo podrán
encontrarse sus huellas en sus trabajos under que suele publicar en Spicnic (y
que siguen siendo lo mejor del sello). Además, como bien sabe Zurdman, Canut
habla con ausencia de pasión cuando se refiere a su modus operandi en Fangoria.
Da la impresión de ser un gregario de un siniestro sello (como Discos Muerte a
las órdenes de Swann), un simple obrero de la industria. Eso no ocurre cuando
desenfunda su bajo eléctrico para invocar el espíritu y los tres acordes de
Johnny Ramone (¿se librará entonces de la carga fangoriochuequera?).
Acerca de la famosa comparación Alaska-Montiel, diré algo que
beneficia a la segunda. Ese intento de emular por parte de una Alaska cada vez
menos hábil (el blanco engorda más aún) a alguien indiscutiblemente
histórico como Sara Montiel me recuerda al intento suicida y patético de Mónica
Naranjo por querer ser la nueva Mina. Cuando Juan de Orduña -director típico y
tópico- realizó "El último cuplé" (1957) consagró en España a la
Montiel. No sería justo comentar los interesantes precedentes de Saritísima: su
matrimonio con Anthony Mann o sus incursiones en Hollywood de la mano de
monstruos como Sam Fuller o Robert Aldrich. El único momento de
gloria fílmica de Alaska es su brevísmo cameo en "Arrebato".
Pues bien, así como es ilógico defender a la Montiel como actriz o
cantante -todos sabemos que no destaca ni en lo uno ni en lo otro- no conviene
olvidar que a raíz de aquel gran éxito taquillero de nuestro cine se produce
algo remarcable: aparece la primera hembra del cine español con capacidad
sexual. Sara dejó constancia de que el sexo era posible en nuestro cine. Ese
nuevo toque erótico -independientemente de si preferimos a las italianas, si
Sara no es fina, si no es de nuestro agrado, etc- es historia. Y a mí me
parece, contemplando su foto en Casa Costus con motivo de su 18 cumpleaños, que
Alaska perdió todo su encanto al perder la adolescencia; se envejeció
súbitamente. Poco supuso sexualmente en una época tan poco sexual como la
movida. No hay erotismo en las mediocres fotos de Pérez Mínguez donde todo es
disfraz, impostura e imitación. La Montiel recuperó el cuplé, las historias
amorosas pícaras y nostálgicas -tan del agrado de Edgar Neville- al tiempo que
encendió la imaginación calenturienta de toda una nación. Alaska siempre será
bruja, oscurantista, siliconizada hasta la médula, sin capacidad erótica y
también sin redención. En la nunca bien ponderada "Varietés" (1970)
de Bardem, Sara interpreta con dignidad a una estrella en decrépito. ¿Alguien
se imagina a Miss Fangoria en un drama parecido?
···
EL ZURDO:
Debo puntualizar que ambos (Mertens y Nyman: de hecho, más Nyman
que Mertens por número de bandas sonoras) son aderezo de Greenaway.
Precisamente, descubro a ambos por las pinículas de este señor. Como a Glass
por el MISHIMA de Schraeder.
A mí los grupos ramonianos de Canut me aburren, cosa que no me
ocurre con los RAMONES, pese a que los 9 o 10 álbumes ramonianos sean muy
parecidos entre sí (salvo guiños heavies de algunos de los últimos). Un disco
en solitario de Berlanga (incluido el peor -o sea, el primero-) jamás me
aburrirá: la única cosa paralela de Canut que me sigue tocando el kundalini es
la primera etapa de PARALISIS (la
mejor etapa, a mi juicio).
En cuanto a lo tercero, hoy por hoy, tanto Alaska (por su
embrutecimiento irreversible y harkonesco) y la Naranjo (por su plebeyez
innata) son tal para cual. Aunque, al menos, la Naranjo, con ese certero
instinto de las auténticas trepas, tuvo más gusto en la elección de su diva a
profanar. Alaska no es una manchega pobre dispuesta a comerse el mundo y con
certero instinto para arrimarse a buenas sombras (Mann, Fuller, Aldrich...) y
que ha perdido con el tiempo (como puede comprobarse zapeando sus andanzas por
la telebasura del cuore), es una criatura burguesa surgida de una mezcla
imposible de genes culturales (republicano asturiano exiliado vs cubana
babilónica de cuando los Corleone hacían tratos en la isla: la tragedia del
mestizo que tan bien explica Lawrence en LA SERPIENTE EMPLUMADA es la tendencia
entrópica de la petite Torrebrune que la llevó a renegar de lo mejor de sí -el
patrimonio genético paterno, que es lo que le daba inteligencia y personalidad,
ilustración en la acepción zurdiana: leyendo a fondo la biografía de
Rafa Cervera se explican muchas cosas- para rebozarse hasta los posos en el
burdelesco vaivén tropical y todo lo que huela a decadencia y entropía).
DANDYSMO: COMENTARIO COLATERAL A LA POLEMICA SITA EN EL BLOG ABAJO MARCADO
http://sydgermen.blogspot.com/2006/11/en-elogio-del-anti-todo.html
JUANJO SEIXAS:
Yo tampoco entiendo mucho qué tiene que ver el dandismo con la
mediación: para mí la característica que mejor puede definir a un dandy es su
capacidad de irritar las opiniones comunes: y como su elegancia es fruto de una
elección, poco le importa al dandy tener buena o mala reputación. Actitudes que
no creo que se puedan aplicar
a un mediador, con su sentido mercantil de la vida: negociar, negocio...
De todas formas, habría que empezar por definir qué es exactamente
un mediador: ¿es lo mismo que el prudente? yo creo que no, el prudente es el
que conoce el modo de tomar buenas decisiones, lo cual no significa que sea una
elección geométrica equidistante entre dos posiciones. Creo que un buen ejemplo
de hombre prudente es Jünger, que creo entender que siempre buscaba el enlace
entre las diferencias. Por ejemplo, entre la supuesta oposición entre ética y
estética, él dice en «Los titanes venideros»:
«Ver la relación entre ética y estética simplemente como una antítesis no es
suficiente para mí. Más aún, conduce a una desviación. Por eso diría que ética
y estética se encuentran y se tocan por lo menos en un punto: lo que es
verdaderemente bello
no puede no ser ético, y lo que es
realmente ético no puede no ser bello».
DIOS SALVE A LA MOVIDA
MAGDALENA
MERLOS:
He estado leyendo el libro "Dios salve a la movida"
(Silvia Grijalba). Me parece que tiene un punto de vista nuevo, pues la autora
remite a la prensa del momento, más cercana a los hechos que otros textos
elaborados a partir de los recuerdos como fuente. Ello le permite estar al
margen de filias y fobias: no conoció los hechos de primera mano, por lo que la
sitúa más cerca de la figura de un historiador, que de la de un cronista o un
abuelo cebolleta. Junto con el de Gallero es el que más me ha convencido.
La sistematización del trabajo me ha parecido acertada. Sólo transcribir dos
citas: La referencia a "La liviandad del imperdible" (un apartado de
uno de los capítulos, el dedicado a los medios de comunicación) y "La
pluma eléctrica" como obra "del músico, escritor e ideólogo
Fernando Márquez el Zurdo". La referencia a los orígenes del fanzine,
donde ha cogido como fuente directa los textos de Fernando.
Y otro apunte del epílogo de Patricia Godes: su añoranza a los
primeros tiempos, antes de la esclerosis y el sectarismo a que se llegó,
primeros tiempos que identifica con un ejemplo: "cuando Fernando
Márquez, que a pesar de ser líder de un grupo punk, alababa a Mia Martini y
Darío Baldan Bembo".
Por último, la para mí desconocida anécdota: el “¡Me cago en
Bryan Ferry¡" de Jorge Martínez ante Generación Mishima.
EL EXTRAÑO CASO DE SIMON ROYO
JUANJO SEIXAS:
En la
última semana me encontrado con el nombre de un tal Simón Royo en un montón de
sitios. Creo que es filósofo (prepara su tesis con Quintín Racionero), a la vez
que trabaja como Vigilante Nocturno en la UNED. Parece ser que tiene afición a
usar sus puños contra todo materialista buenista que se le ponga por delante
(los seguidores de Gustavo Bueno han creado un blog para ponerlo a caldo: http:/simon-royo.blogspot.com/).
Creo que también publica cosas en Rebelion.org.
¿Vosotros lo conocéis? ¿Sabéis algo de él?
···
EL ZURDO:
Estoy leyendo el link que adjuntas y alucino con el tal Simón (¿un
Travis letrado? -por aquello de la vigilancia nocturna... qué pena que no nos
llegase éste al foro en vez del Dunkeleches: parece más enjundioso en su
magín-) y con los que lo atacan. Me parece todo ello muy apocalíptico. Tal vez
SR sea desde su condición bedélica en la UNED como Abimael Guzmán en su época
docente: ¿saldrá algo decente de ello? (o sea, una guerrilla fanática que haga
temblar Madrid).
Sigo leyendo con deleite toda la trifulka.
···
JUANJO
SEIXAS:
artículos
de SR en REBELION (estoy en plena pesquisa sobre este sujeto)
http://www.rebelion.org/mostrar.php?id=sim%F3n+royo&submit=Buscar&inicio=0&tipo=\5
http://www.rebelion.org/mostrar.php?id=sim%F3n+royo&submit=Buscar&inicio=0&tipo\=5>
perfil:
http://www.filosofiayliteratura.org/Lindaraja/curriculum/simonroyo.htm
···
HUBERT:
Mira por dónde me voy a sumar a este revuelo royista o royiano. Un
tipo que sacude a los buenistas no puede ser mal tipo. Entro a bucear en rebelion.org.
···
EL
ZURDO:
Desde que Juanjo me descubriese al sujeto, he estado pesquiseando y
husmeando y me he leído unos treinta artículos enrroyados.
La conclusión que saco es que, en parte, sus antagonistas
buenófilos tienen razón al calificarlo de sujeto demasiado embebido en libros y
poco receptivo a la realidad. Lo veo como un ultrateórico, integrista del
marxismo (de marxista a marxistón y después a marxistonto, el tobogán es
breve). Encastillado en sus dogmas (talibán de Marx como los de la Falange
Independiente lo eran de Primo y los talibanes propiamente dichos del Corán),
las vicisitudes temporales no le hacen mella. Da gustito cuando, desde sus
dogmas, da palos a las patologías de la opulencia (gays, lesbianas, feministas
caviar...) o se pone en el lugar de la basura proletaria para explicar
determinadas actitudes broncas hoy consideradas de mal gusto por el empíreo
políticamente correcto y económicamente pudiente (maltrato y tal), o recuerda
determinadas vindicaciones anticolonialistas hoy semienterradas por el
eclecticismo postmoderno, o se caga en Oriana Fallaci (algo siempre de
agradecer), o ataca a los medios con perogrulladas de izquierda real
(perogrulladas siempre bienvenidas en un tiempo en que se nos insiste en
considerar a la basura mediática como algo válido y justificable -hasta Chávez
y Castro juegan a ello en su bufonesco trato telegénico con las masas-) o afea
el gesto de Arafat dando sangre por las víctimas de las Torres Gemelas (el
único que lo ha hecho públicamente aparte de menda). Pero cuando da palos a
Stalin desde la vulgata marxista (que no marxiana -a fin de cuentas, es una
incógnita qué habría opinado el auténtico KM del padrecito georgiano-) o a Leni
Riefensthal desde la vulgata sontagiana (aunque atina en algo cuando la llama "tonta":
la chica tenía un gran talento plástico y escenográfico pero su magín
discurridor es bastante limitado, como queda bien claro en sus memorias,
interesantes sobre todo para comprobar la hipócrita perfidia de los vencedores
y conversos respecto a los sujetos a depurar pero desde luego carentes de toda
reflexión trascendente -si las comparamos con las remembranzas de EJ o con los
libros de Céline o con el "GILLES" de Drieu, la Riefensthal no
superaría la altura del chimpancé que le escribe los guiones a Krusty el
payaso-) o habla de Nietzsche (su otra debilidad junto con Marx -pero debilidad
controlada con corsés ideológicos más o menos correctos: ¿tal vez porque su
visceralidad Travis de vigilante nocturno anhelaría un Nietzsche total,
hulkiano, sin fisuras, pero inoportuno para moverse en los vericuetos
universitarios de izquierda?-) desde el reduccionismo
batailliano/deleuziano (Nietzsche bueno, libertario, lúdico, nada proclive a
actitudes predadoras, antimateria de la versión parda -creo que Nietzsche
trasciende tanto la versión de Bataille y Deleuze como el reduccionismo
contrario iniciado por su hermana y cuñado: ambos reduccionismos tienen parte
de razón y, por tanto, son mentira si se los pretende como absoluto-), puedo
detectar lo alicorto de su vuelo.
Me parece un callejón sin salida, a su manera tan sin salida como
su detestado Gustavo Bueno. Prefiero con creces la actitud sincrética rojiparda
de Verstrynge, el neostalinismo de Fernández Ortiz o el lúcido devenir
ideológico del maestro Zinoviev. Van al fondo de las cosas, con un pie en su
formación metapolítica y otro en la inmersión constante en lo real (incluida su
propia etopeya -SR, por el contrario, parece regodearse en su dogmática para
cerrar a cal y canto un posible armario lleno de explosivas
incorrecciones que pueden asomar muy eventualmente como exabruptos reactivos o
puñetazos literales-), aunque sus palabras resulten menos oportunas para slogans
de izquierda.
···
ELDERLY:
Simón Royo es amigo de una buena amiga mía. Obtuvo la primera plaza
en toda España en las oposiciones a profesor de secundaria y rechazó el puesto
para dedicar más tiempo a la filosofía, empleándose como vigilante nocturno. Se
puede decir, como de casi todos los tertulianos de este café herético, que está
«loco», en muy saludables términos. En estos tiempos oscuros la peor
enajenación es la normalidad..
DE ANGELES Y SANTOS
DARIO
VICO:
He de decir que a mi el concepto de ángel me parece una
mondrigonez.
Particularmente me interesa mucho más la santidad, y además creo
que es un momento espléndido para embarcarse en ella porque establecidos otros
protocolos para disfrutar el extasis y diluir en algo más grande el sufrimiento,
la santidad está abierta por fin a los verdaderamente bondadosos, y no a
paroxistas y reprimidos. Creo que hay que perfeccionar la bondad en lo terrenal
porque por lógica las fuentes espirituales deben ser malignas. Es lo que
mantiene el equilibrio. Dios dsestruye y el hombre reconstruye, esa es la
dinámica. Así que si hay un intermediario entre eso, una especie de policía
municipal espiritual, estoy más por creer en los diablos que en los ángeles,
sin verles a estos sentido, utilidad u obra. Me gusta la frase "Se me
llevan los demonios", puedo entender perfectamente a donde te llevan.
ASí que creo en los santos que evaden el tormento y no aspiran más que a la
nada, intangibles para lo espiritual, para el mal.
···
DILDO:
Debo confesar que maese Vico me ha sorprendido porque, a su manera,
da en el clavo en el tema de los ángeles y los santos e incluso, en su última
afirmación ("creo en los santos que evaden el tormento y no aspiran más
que a la nada, intangibles para lo espiritual, para el mal") enlaza
con el budismo zen.
En la tradición zen, los ángeles son "devas", o
sea, seres celestiales y, como los demonios, los "pretas"
(espíritus hambrientos), las bestias, los "asuras" (demonios
en lucha) o los seres humanos ("ningen", en nipón paladino) se
encuentran atados al círculo incesante del nacimiento y la muerte, es decir, a
la ley de la causalidad, de acuerdo con la cual la existencia en cualquiera de
estos planos se determina por acciones precedentes. Los seis ámbitos citados
son los mundos de la NO ILUMINACIÓN. O sea que NO HAY, EN ÚLTIMA INSTANCIA,
MUCHA DIFERENCIA ENTRE EL RANGO DE UN ÁNGEL, EL DE UN DEMONIO Y EL DE UN SER
HUMANO CORRIENTE Y MOLIENTE. Sin embargo, los "iluminados" (o "santos",
como dice Vico) están muy por encima de todos ellos, pues conocen la felicidad
de la paz interior y la libertad creativa, ya que al haber trascendido su
ignorancia y engaño a través del Conocimiento (o sea, la inmersión de la mente
en "Mu", en el Vacío, en la nada absoluta), son liberados de
la esclavitud que representan las inclinaciones kármicas que surgen de acciones
pasadas y dejan de cosechar semillas cuyo fruto sería una nueva forma de
lastre kármico. Sin embargo, la santidad o iluminación no suspende la ley de
causa y efecto. Cuando un iluminado se corta un dedo sangra, y cuando come en
el McDonalds le duele el estómago. Asimismo, tampoco puede escapar de las
consecuencias de sus acciones. La diferencia estriba en que acepta -es decir,
puede ver y penetrar- su karma y, por ello, ya no está atado a él, sino que se
mueve libremente dentro de él.
···
EL
ZURDO:
Ya sabes que lo mío no es la teología sino más bien la metapolítica
y la naturocracia. Siempre me ha caído más simpática la gente que se mueve
entre ángeles (y demonios, que, tú lo has dicho, también son ángeles) que
quienes sacan a colación el tema de la santidad. Personalmente, sólo hay
alguien relativamente contemporáneo a quien (desde mi
percepción-subjetiva-y-sin-ánimo-de-sentar-cátedra) vea cerca de la santidad,
que es Simone Weil (alguien, por cierto, que tú me dijiste en varias ocasiones
que te causaba repelús).
A mí me atraen los ángeles, básicamente en tanto que enviados de
algo trascendente (con esa humildad del mensajero) o que demonios (con ese
heroísmo del transgresor). Creo que la santidad, como el sexo, debería
mantenerse en una decorosa intimidad o se tiende a que, al contacto con el
aire, se corrompa (como el sexo) y se convierta en aspaviento farisaico (como
el sexo en inanidad exhibicionista -en ambos casos, imagen del más discutible
de los egos-).
El ángel (como el animal -y como el humano, en lo que tiene de
animal-) es puro. El santo es inefable, ejemplar desde la intuición de cada uno
pero no desde el pregoneo (prefiero la fama silenciosa que adquiere un hombre
santo en el mundo extremooriental que ese cacareo desagradable de la letrina
hindú -por usar expresión, lo de la letrina, de nuestro maestro Rafa-). SW fue
en su vida una pobre inepta en la praxis, casi un personaje woodyalleniano
sacado de BANANAS, con intuiciones geniales que para algunos (los sionistas,
por ejemplo, pero también los demócratas-de-toda-la-vida o los defensores de
una existencia lúdica y hedonista) son perversas y monstruosas. Personalmente,
aparte de SW, lo más cercano a la santidad reciente en el tiempo que imagino
(precisamente por su iluminada monstruosidad) sería Lecter (el de verdad, no
nuestro forero homónimo).
Hablemos de ángeles y de sóphicas Magdalenas y sigamos a los santos
si nos parece, pero no los pregonemos en calidad de tales. Hablemos de
monstruos, en todo caso. Pregonar mucho la santidad, no sé, me sigue sonando a
fariseísmo, a ZP restregando los huevecillos contra la tumba de Ghandi.
En fin, es una opinión...
···
JUANJO
SEIXAS:
Para los admiradores de SW: Trotta acaba de publicar otro título,
POEMAS SEGUIDO DE VENECIA SALVADA. Tiene buena pinta, y me voy a poner con él
dentro de poco, así que ya os contaré
En la reseña de Trotta dice que trata de «retomar por primera
vez desde Grecia la tradición de la tragedia en la que el héroe es perfecto,
narrando el sufrimiento del ser humano sometido a la necesidad impenetrable,
que lo impulsa a realizar actos que él mismo acaba aborreciendo». Al leer
esto me vino a la cabeza la noción de la
santidad de la que hablaba Dildo hace poco: creo que todo eso de trascender a
través del Conocimiento, inmersión en el Vacío y la Nada, sólo recoge una parte
del éxtasis, el apolíneo; pero faltaría lo que hay de locura y desmesura. O
sea, que existe otra parte, comunicativa (el lenguaje es lo más divino) o de
conflicto, tan
importante como la del descubrimiento interior. Ahí colocaría a santos
guerreros como Juana de Arco, por ejemplo. ¿Qué os parece?
···
EL ZURDO:
Yo diría que existe una ecuación paradójica (en plan banda de
Moebius más que las dos rayitas paralelas) en el binomio Juana/Gilles que,
desde mi imaginario, hoy trasladaría como percepción subjetiva en SW/Lecter
(santidad monstruosa enlaza con monstruosidad sacra -por cierto, la imagen de
Lecter crucificado entre cerdos no puedo quitármela de la cabeza cuando releo
las páginas de SW relativas a la crucifixión como situación pura, sin
recompensa burguesa, sin happy end). La santidad debe provocar escalofríos y no
ser mancillada por la chusma (todo eso de sea santo, o Cristo, o Ghandi en 15
días que se nos vende hoy y que me parece el colmo de la entropía y de la
profanación de la noción de lo santo). La SW monstruosa, anatemizada por los
poderes vigentes (los santos guardianes de la memoria de Mathausen, los
demócratas que objetan sobre sus propuestas de gobierno para Francia -tan
deliciosamente chiítas-, y demás ralea), es la que me pone, no la versión
edulcorada y emasculada para consumo de oenegeros y limosneros.
Y, como Cristo de ahora mismo, insisto, Lecter entre cerdos.
···
DILDO:
Volviendo al tema de los santos, yo no me considero capacitado para
decir quién lo es y quién lo deja de ser (eso sólo corresponde a los verdaderos
Maestros), así que recurriré a algunas frases de terceras personas que creo que
están más cerca de la Verdad.
Un síntoma de santidad, sin duda, sería la frase-epitáfio de Nikos
Kazantzákis: "NADA ESPERO, NADA TEMO, LIBRE SOY".
Y ante posibles falsos santos (esos ególatras exhibicionistas que
menciona La Mueca) echo mano de estas palabras de Yasutani Roshi:
"No se puede decir que alguien cuyas acciones están dominadas
por el ego haya tenido una iluminación válida. Es más, una experiencia
auténtica no sólo revela las propias imperfecciones, sino que a la vez crea la
determinación de deshacerse de ellas".
¿Por qué hay santos que tienen cierta actitud altiva, esa pose de
superioridad santurrona? También existe una explicación: La iluminación, aunque
enfoca la visión humana (siempre distorsionada) paradójicamente crea un cierto
orgullo ante tal logro y esto mancha la pureza inherente de la mente. El
iluminado que sienta ese orgullo debe seguir practicando para no anquilosarse
en un grado iluminatorio inferior.
El orgullo desmedido de ciertos (presuntos) santos también puede
ser fruto de lo que en budismo zen se llama "la cueva de Satán" o
"el hoyo de la seudoemancipación". Es una etapa del zazen (y,
supongo, de cualquier otra disciplina espiritual) donde uno experimenta una
serenidad absoluta y se engaña creyendo que es la Iluminación. Se necesita un
esfuerzo inspirado para romper este estado y trascender, o se corre el peligro
de quedarse en esa ilusión para siempre. Por eso, digo yo, hay tanto Escrivá de
Balaguer suelto.
CHILDREN
OF MEN
EL
ZURDO:
Ayer me vi con Casilda la peli
de Cuarón y nos decepcionó bastante a ambos en cuanto a argumento (lleno de
lagunas que se quieren elipsis pero son lagunas) y mensaje (profundamente
correcto, felicista y convencional -el final feliz y superalambicado me parece
digno de un culebrón vespertino de A3, de estos de secuestro de niños,
custodias en litigio, maltratos y demás-). Técnicamente muy lograda, los
actores perfectos (tarde o temprano alguien tenía que darse cuenta del parecido
físico entre Caine y Lennon y explotarlo cinegénicamente) pero un pastiche
antiguerras (guiños a la cosa balcánica, al Ulster y al Cono Sur). A medida que
transcurría la película y me iba quedando frío, pensaba lo muy distinta que
habría quedado esta historia en manos del Hanecke previo a CACHE (TIEMPO DEL
LOBO y tal). No sé, pero lo único que me pareció válido de la historia es su
lado meramente profético tanto de que UK profundice en la policialización
iniciada por Blair y llegue a convertirse en un estado de excepción, y que los
blancos decadentes nos quedemos infecundos. Lo que me parece una soberana
chorrada es que el mesías sea negro. La raza negra está abocada a la extinción
tanto física como cultural en un plazo de brevedad galopante (sólo hay que ver
los datos de la OMS en torno a Africa y la penosa situación de los
afroamericanos tanto en Haití como en USA -sin entrar en los híbridos
etnoculturales tipo Condoleesa, Cosby, Murphy, Whoopy, etc-).
Me quedo, en plan peli con
actores y escenario anglo pero dirigida por latino, con EL NIÑO QUE GRITO PUTA
de Juan José Campanella. Donde descubrí a mi adorada Moira Kelly y que me
parece un trabajo más redondo y honesto tanto en contenido como en continente.
LOS LINKS DEL DILDODROMO
EL
ZURDO:
Ayer, tras leer la última glosa chinarresca de Luigi, se me ocurrió
repasar la lista de enlaces de su blog y fue una experiencia apasionante. Había
visceral transversalidad (esa palabra que tanto jase de reí a sus
ex/camaradas bruttos -como si fuese exclusiva mía-), incorrecciones mil (tanto
en el fondo como en la disposición: ese Codreanu dándose el bracete con el
catálogo de Txalaparta...), rarezas surgidas de una curiosidad natural y
espontánea (no manieristas y sectarias construcciones por mor de lo bizarro
-hoy ya tan institucional como la mondriguez-). Seguramente, una de las cosas
más refrescantes de Luigi es que se la refanfifla bastante el qué dirán y eso
se expresa muy bien en esta patulea de enlaces.
Mi osita, últimamente, se encuentra a Luigi en los sitios más
inverosímiles: la oda a las lorzas en su blog, un GQ hojeado en la peluquería,
un master sobre pollas en la medianoche de La Sexta, algún comentario teológico
extractado de este foro... Esto es renacentismo y variedad. Sin caer por un
momento en el estereotipo ni el género. Luigi es un degenerado (en el sentido
más noble de la expresión -como menda y como, espero, buena parte de vosotros-)
al que toda convención le resulta pequeña.
Siempre frente al ¿POR QUE? opongamos el ¿POR QUE NO?
Echadle un veo a los links.
No os arrepentiréis: es como un rollercoaster wikypédico.
COLOR CARAMELO DE RON
ELDERLY:
El afán de novedades, la curiosidad, el hastío de unos sentidos estragados... me impelieron a deslizarme en la oscuridad del Barbarella/Nasti, con sus asendereados ñoñispopis percudiéndolo todo. Me agradó contemplar a Juan de Pablos en los platos, flanqueado por el nunca bien ponderado Julio Ruiz. Hasta me pareció ver a Kikí d´Akí, vacilante su mirada empañada, con su consorte en toda su correcta humanidad. Divisé vagamente a Kent Zurdman con el bravo Ludwig de Landeira. El objeto de mi spam no es otro que el de ponerles sobre aviso del nacimiento de una promesa, un crooner avefénico -por lo que sé-, en deuda emocional con el coqueto rocanrol aerodinámico. Les hablo de Color Caramelo de Ron, una encantadora sorpresa salida de Dios sabe dónde, con una deliciosa puesta en escena -y llévense de ahí a Aldo Linares, con un look cimarrón ad-hoc para internarse en un kibutz-. Blazer de cuadros escoceses de paño arrogante, propio de la guardarropía de un gentleman, con la pátina de las grandes ocasiones. Este stand up songwriter nos regaló su hit navideño, como sólo los grandes acostumbran. Una amiga mía ha definido el tema como "esquizofrénico", pero es que los paladares no están para estas mieles. Peformance, accionismo, terrorismo cultural, escultura y música de la buena (amén de peregrina) a partes iguales. Armado de su armadillo, este asaltador de escenarios enmudeció a la complaciente feligresía indie. Hay en sus canciones meandros, reposos, trampantojos, riffs luciferinos, cajas de música, jingles para carruseles de la Vieja Europa, emanaciones como paridas por Martin Rev, diálogos capturados de Retorno a Brideshead. AMOR EN FRÍO nos puso a todos los pelos como pértigas. Feliz Navidad a todos.
SIN PRISA, MEJOR PARA LA CULTURA
EL
ZURDO:
Acabo de terminar el libro “EL
PAIS: LA CULTURA COMO NEGOCIO” de Manuel Gª Viñó (Ed. Txalaparta) que me dejó
Dildo con fervorosas recomendaciones de la excelencia de su contenido.
Y, en efecto, el volumen no tiene
desperdicio (quizás rechine un poco –sobre todo en relación con quien edita la
cosa- el prólogo de Antonio Gª Trevijano, sujeto que nunca me ha inspirado
mucha confianza por aquello de ir de vestal inviolata de la democracia
española al tiempo que no hacía ascos a actuar como asesor del dictador
guineano Francisco Macías o, años después, a rodearse de jóvenes nacionales
–empezando por su discípulo amado Javier Esteban, miembro de la basista
Area Inconformista en el 90/91, y azul villapalista en los 80 como cofrade,
aparte de la consabida FE/JONS, de Rerum Universitatis, Alternativa
Universitaria, El Tiburón Convincente y demás retahila de eslabones ad hoc para
fachas con vocación de trepas en el escalafón complutense, y hoy pannelliano de
toda la vida, trevijanista a muerte y profesional mediático desde la
sinecura de “GENERACION XXI”- cuando se montó aquel complot
nacional/republicano para apear al felipismo y encumbrar a Aznar –e inspiró con
su centralismo exacerbado y su dialéctica martillo de independentismos todas
las mutaciones fachas que llevan el adjetivo “republicano” en su avatar,
caso del Partido Nacional Republicano, Movimiento Social Republicano, etc-; al
menos, cuando Rafael Gª Serrano, desde su absoluta coherencia antidemocrática y
francofalangista, confesaba en un artículo que Idi Amin le caía simpático,
resultaba sin mácula de hipocresía ni de cinismo). Pero, dejando esto aparte,
lo que cuenta Gª Viñó da en el clavo para entender cuál es el verdadero poder
(Gran Poder, Jesús) que tiene la última palabra y responsabilidades últimas en
este país (nunca mejor dicho).
El libro de Gª Viñó enlaza, en la
denuncia de borrado de huellas y actitudes cínicas, con uno de los 80
(“LITERATURA FASCISTA ESPAÑOLA”, de Julio Rodríguez Puértolas). Es interesante
cómo, en ambos, uno de los nombres/estrella (y troquel maestro para los
simuladores y tránsfugas de los cínicos del polanquismo) sea Camilo José Cela:
su carencia total de escrúpulos, su apetito desmedido por el dinero y los
honores, su oportunismo, su prepotencia y cobardía a un tiempo y su nulo
respeto por la cultura (ante la cual mostró siempre una actitud más de
proxeneta que de sacerdote), servirán de libro de estilo a toda la galería de
canallas y supercanallas (que diría Holly Golightly, esa escapista de sí misma
y trepa social tan naif y bienaventurada que al final acabó siendo casi
canonizable –aún más, si la comparamos con estos escualos de los que
hablamos-), con Cebrián y Polanco/Chernienko a la cabeza, y seguidos por
cualquier columnista y columnisto de “EL PAIS” con libros publicados y
propagandeados por el grupo PRISA.
Gª Viñó denuncia sin trampa ni
cartón, con honesta exhaustividad, mostrando, párrafo a párrafo, el flagrante
delito contra la novelística y la inquietud literaria de Almudena Grandes,
Elvira Lindo, Javier Marías, Rosa Montero, Maruja Torres, más los académicos
Juan Luis Cebrián, Antonio Muñoz Molina y Arturo Pérez Reverte, hoy
considerados por la crítica degradada en departamento de marketing como émulos
de los auténticos novelistas de otrora (el autor recuerda los complejos y
rigurosos orígenes de la novela moderna, acorde con las últimas conquistas del
pensamiento –y aquí enlazaría con una obra capital para centrarnos en este
fenómeno, como es “INTRODUCCION A LA LITERATURA DEL SIGLO XX” de Vintila
Horia-, y llega a la conclusión desoladora de que lo que hoy se considera
CULTURA e incluso se sanciona como tal por la Real Academia hasta no hace mucho
era literatura de kiosko y estación de ferrocarriles, subcultura para
criaditas y horteras, y parejo a nombres como Corín Tellado, Marcial Lafuente
Estefanía, José Mallorquí, Felipe Trigo, Elena Fortún, Carmen Linares Becerra o
Alvaro de Retana, quienes, según el actual rasero establecido por la
mercadotecnia pseudocultural, hoy ocuparían sin duda sillón en la RAE –bueno,
en el caso de Retana, un clon suyo de última generación, Leopoldo Alas, tiene,
o tenía hasta hace poco, sus aspiraciones al laureo-).
Desde mi percepción subjetiva, de
pronto he comprendido varias cosas relacionadas con mi biografía. Algunas las
sospechaba pero ahora las puedo confirmar.
Por ejemplo, la razón última de
la persecución sañuda y sádica que me dedicó Diego Manrique durante casi una
década, a partir del 86. D.A.M., como buen elemento vinculado a “EL PAIS” y al
PSOE, y siguiendo el modelo áureo del ya mentado don Camilo, no es un sacerdote
al servicio de la música sino que la música está en el orbe planetario para que
Diego viva de ello y rentabilice, de paso, sus instintos enciclopédicos (si no
se rentabiliza, no vale: máxima polanquiano/cebrianesca). El cinismo mostrado a
mediados de los 80, cuando acuñaba aquello tan bonito de “el PARA TI es el
himno generacional de los 80” en tanto procuraba por todos los medios que
el autor de tal himno no levantase cabeza ni volviese a tener cauce público
desde el que emitir canción alguna (himno o no himno), concuerda con hazañas
semejantes narradas por Gª Viñó respecto al censor/mártir progresista C.J.C. y
toda su recua de émulos (a veces, sólo mulos –sin é-). Me he preguntado a
menudo si a Diego Manrique yo le he gustado alguna vez como autor y cantante, y
he llegado a la conclusión de que no. Cuando él empieza a escribir sobre mí y
promocionar mi carrera es con LA MODE (antes, habían sido Ordovás –que nos
presentó al Mariscal Romero para grabar en Chapa y rompió su relación con este
sello nada más empezar al ver el desprecio con que Romero trató a los KAKA DE
LUXE-, Tena –que grabaría las maquetas de PARAISO más tarde editadas por NM-,
Garrido, hasta Abitbol –aquel conato de presentarnos a la discográfica
Chisswick cuando PARAISO-, pero Diego no chistaba). Y el motivo, obviamente, no
soy yo, sino una razón más clánica (en el sentido sopranesco del
término): ayudar a sus paisanos burgaleses Yayo Aparicio (manager de LA MODE) y
Luis Marquina (batería del grupo en la primera etapa), a lo que añadir, más
adelante, una buena relación con Mario Pacheco (director de Nuevos Medios), que
le llevaría incluso a hacer una entrevista de promoción del disco de POP DECO a
principios del 86 (esto es, el mismo disco que unos meses más tarde haría lo
posible por vetar en los medios junto al resto de la obra zurda –esto queda aún
más patente en el programa de tv “QUE NOCHE LA DE AQUEL AÑO”, donde, como una
secuencia orwelliana, se escamotea toda la saga vinculada a KAKA DE LUXE por
aquello de que servidor no apareciese en el programa de ningún modo-). El
cambio de actitud tiene una explicación más acorde con el proxenetismo cultural
y miedo a la pérdida de chollo laboral que abundan en el libro de Gª Viñó y no
a ninguna sensibilidad antifascista herida por mis apariciones en el spot de
Falange o mis escarceos panfletarios con la primera singladura de PROYECTO
BRONWYN. Diego sabía perfectamente cuáles eran mis simpatías políticas
(falangismo, coqueteos con AP... –llevaba yo además dos años en el diario “ABC”
escribiendo artículos fuertemente politizados-), y ello no le llevó a negarse a
promocionar a LA MODE. Diego no sintonizaba, cuando inició su implacable caza
de brujas contra mí, con grupos visceralmente antifascistas (PCE –ahí militaba
Tena, siempre dispuesto a ayudarme-, LCR –ahí acababa de entrar Eduardo Haro
Ibars, quien presentaría el disco de POP DECO en la SGAE saludando precisamente
mi condición de falangista-, abertzales –en un programa de la ETB, con un
equipo mayormente simpatizante de esas tendencias, hicieron la única promoción
televisiva del grupo nefando PROYECTO BRONWYN en el 88-, anarquistas...) sino
con el PARTIDO DEL GAL, justo cuando buena parte de la Falange vasca estaba
metida en el ajo, babeaba por Damborenea y recomendó el voto útil en las
elecciones vascas del 86 al PSE/PSOE (tres meses después de mi presencia en el
famoso spot de las generales y motivo para que yo rompiese con Falange durante
una década –cosa, por cierto, que a Diego no pareció importarle demasiado, lo
mismo que mi militancia en el CDS del 87 al 89, pues continuó con su cerco,
como muestra aquello que me contó Tena de que, cuando éste, a fines del 88, me
salvó de un posible suicidio incluyéndome como colaborador en su magazine de
RNE, Diego le intentó convencer para que me echase-). ¿Acaso hubo alguna
consigna a lo Big Brother, muy propia del cinismo sociata/polanquiano, de
machacar toda relación explícita de alguien de la movida con Falange justo
cuando el partido/grupo mediático que daban de comer a Diego usaban a los
azules como fontaneros en sus tareas sumergidas de guerra sucia? Puesto a ser
represaliado, habría preferido el macarthismo original, del senador de
Wisconsin o del joven Nixon, exclusivamente ideológicos, que toda esta
retorcida dinámica de mierda y maquillaje de los manejos del poder. Por cierto,
y para que no quede todo como una mera paranoia zurda, quiero recordar que en el
IBERPOP del 89, al que fui invitado (testigos, entre otros, Iñaki Glutamato y
José Mª Rey), el tema central era LA PAYOLA (o sea, los críticos que se dejan
sobornar por medios y discográficas) y el nombre más mentado durante el debate
fue... DIEGO ALFREDO MANRIQUE.
Pasemos a Almudena Grandes. Esta
señora publica una novela usando como título un fragmento del “PARA TI”. Que yo
sepa, para la interfecta parece haber una completa disociación entre canción y
autor de la misma. Almudena Grandes jamás ha demostrado la menor simpatía hacia
mí (de hecho, nunca ha intentado hacerme llegar la novela de marras, cuyo
título le brindé involuntariamente) y, desde luego, tanto su novela “LAS EDADES
DE LULU” (que sólo conozco por la adaptación cinematográfica de Bigas Luna –conocimiento
parcial ya que nunca he logrado acabar su visionado ante tal cúmulo de
sordideces-) como los fragmentos de otros libros recogidos por Gª Viñó en el
trabajo que comento, me demuestran una completa falta de sintonía con esta
mujer. ¿Qué diantres vio en mi canción para elegir una de sus metáforas como
título? ¿La eligió al azar? ¿Se la sugirió algún departamento de marketing?
¿Acaso, en algún delirio aberrante, vio al delicado efebo protagonista,
criatura viscontiniana donde las haya, como a un minotauro de bardemiana faz y
pollón bifoliado a lo Rabal, amén de devorador de mollejas? Por lo que sé de la
Grandes a través del trabajo de Gª Viñó, de sus perogrulladas en EPS, de la
película de Bigas Luna, o de su presencia paquidérmica en el programa de Rioyo,
esta señora no tiene nada que ver conmigo. Es demasiado testosterónica (no hace
falta ser lesbiana para ser viril –muchas heterosexuales, comehombres, son, en
su manera de ir por la vida y de relacionarse con el prójimo, de un machismo
repugnante: vamos, Eastwood al lado de la Grandes es una blanca caléndula,
aparte de más atractivo, como hombre, como doncella, como legumbre y como perro
pastor irlandés, si se tercia-). Supongo que, al ver la expresión “CASTILLOS DE
CARTON” en la cubierta de un libro de la Grandes, me siento como una víctima de
violación reconociendo a su agresor en comisaría. La diferencia, a mi disfavor,
es que, encima, a mí se me exige agradecer a la mollejófaga el detalle.
Acabaré mis percepciones
subjetivas asociadas a la lectura de Gª Viñó recordando la putada de Leopoldo
Alas contra mí, absolutamente digna de figurar en el anecdotario del libro que
nos ocupa. La primera noticia de Leopoldo la tuve en los primeros 80, cuando
acostumbraba a mandarme con contumaz insistencia al apartado de correos unos
folletitos con poemas suyos a los que nunca presté mucha atención. Por lo
visto, en esa incipiente fase de su carrera, sí me consideraba importante para
encauzar su arribismo a través de mi chepa. Mucho más tarde, en el 89, coincidimos
en la Lista Antiprohibicionista (organizada por la inefable Yolanda Alba, de la
que Polo era uña y carne). A mediados de los 90, volvimos a coincidir, e
iniciamos una relación de colaboración (asomó su verbo por tres veces
–entrevista incluida- en “EL CORAZON DEL BOSQUE”, presentó en la SGAE mi libro
“LA CANCION DEL AMOR”, y estaba preparando una opera pop con música de
Joe Borsani –de quien se había hecho íntimo y que conoció a través mío-, a
interpretar por menda, Herminio Molero, Germán Coppini e Iñaki Glutamato):
varios de mis amigos nacionales (como los colaboradores corazonescos
Carlos Aguirre y Antonio Valdés) lo trataron con una profunda simpatía y
respeto (cosa que bien hubiera querido para sí David Glamour en su paso por MB
del muy demócrata, libertario, tolerante y antifascista Chechu D’Allessandro:
por cierto, quien conozca las tramas internas de MB y se lea el libro de Gª
Viñó, comprobará que un brutto es a un prisaico como un clon fallido a su
matriz perfecta –todos surgidos del mismo légamo primordial celiano, chulesco,
jerárquico, prepotente, borrador de huellas, incapaz de crear y profundamente
obsesionado con el dinero y el qué dirán-: el prisaico acaba situado en el
plano material aunque su espíritu continúe siendo una cloaca, el brutto lo
tiene peor, pues si en su interior hiede, sus intentos de triunfo material
tanto personal como público siempre fracasan; tal vez por eso, las gentes, como
Dildo, David Glamour o menda, que fuimos excretados de MB y que nunca
compartimos esa miseria espiritual, hemos vivido después un auténtico
despertar, somos mejores personas, disfrutamos de mejores compañías y nuestros
talentos tienen mejores circunstancias para aquilatarse y madurar-). Pues bien,
de pronto, sin razón alguna, Polo publicó en “EL MUNDO”, traicionando
toda esta colaboración y buen rollo, una columna titulada “LA TRAMA NEGRA”
donde criminalizaba a mi revista acusándola de neonazi. Cuando comenté con
Borsani el asunto, éste (que se había convertido en el hermano del alma de Polo
y, por tanto, en su más fidedigno confidente –lo que no fue óbice para que Polo
se cargase el proyecto de obra, en la que JB tenía puesta bastante ilusión, con
su calumnia periodística-) me dijo que lo había hecho para lograr méritos con
vistas a entrar en “EL PAIS” (cosa que, por cierto, jamás logró y, de hecho, ha
acabado fijo a perpetuidad en el diario de Pedro J. y de bufoncito rosa de
Esperanza Aguirre –dama bastante poco grata para la galaxia polanquiana-). O
sea, que Leopoldo Alas (cuyo objetivo era ser de mayor algo así como el mando
intermedio del escalafón prisaico Juan Cruz), no ha llegado a ser aceptado como
ente cultural y mucho menos, academizable, y ha quedado como lo que es, el clon
de última generación de aquel subser de la II República más esperpéntica,
Alvaro de Retana.
Dejo mis batallitas. Sólo una
cosa más que también me cuadra, tras leer el libro este. Que un ser tan
físicamente horroroso como Maruja Torres sea retratada en la viñeta que ilustra
su artículo de EPS como una beldad con gafas, a cuyo lado (en cuanto a
inverosimilitud) las ausencias de ciertos camaradas en las fotos oficiales
estalinianas o el escamoteo de la mancha en la calva de Gorbie en la
iconografía oficial durante su mandato resultan mucho más veniales.
Por dedicarlo a alguien dedico
este post, con rabia (con la mía, añadida a la de Gª Viñó), a las mujeres
ilustradas, decentes y dotadas que aman la Cultura y que tienen que moverse en
planos injustamente inferiores a los que, seguramente, merecen, en contraste
con tanta indocumentada cipaya sin escrúpulos, cuya relación con la literatura
y las artes es como la de Madonna con la música, absolutamente putesca.
···
ELDERLY:
Acabo de leer, en la hemeroteca virtual de elmundo.es, la escalofriante
columna de Leopoldo Alas de la que habla Maese La Mueca. Ni en mis estados
hipnagógicos más desatados, dignos de dildódromo, he llegado a imaginar
semejantes delirios. Esa especie de road movie casticista, con una pareja de
rapados armados de palos y cadenas, mujeres encinta acorraladas, destrozo del
mobiliario recalcitrante del poeta ("No dijeron una sola palabra. Era
evidente que venían a por nosotros"). No he podido parar de reír. Y
toda esa razzia de vándalos nazis había estado motivada por... ¡El Corazón del
Bosque!
Hubiera estado bien, diez años después, salpimentar el relato con
suculentos detalles: Ludwig de Landeira azotando mondrigones en una cheka,
convocatorias pardas en grandes recintos deportivos con opulentas sinfonías de
Color Caramelo de Ron, Maese La Mueca caracterizado como el Dr. Mabuse y el
fanzine TEP como diario ideologizado de masas impreso en las rotativas
estatalizadas de PRISA, ente paracultural al cargo de Juan-Ho. Cuesta no
imaginar a miss Merlos como busto parlante de los informativos, a Hubert como
filósofo wilhelmreichiano oficial y al exquisito Tiffauges como director del
programa de ingeniería de almas.
···
EL ZURDO:
No hace mucho comentaba con
alguien ajeno al foro, en relación con el libro de Gª Viñó, mi idea ya expuesta
aquí del paralelismo entre el grupo PRISA como matriz maestra y MONDO BRUTTO
como clon fallido. Amén de la propia dependencia que tienen los bruttos a la
galaxia polanquiana (demostrada en su selectividad a la hora de dar palos
–siempre en sintonía con lo que en EL PAIS se estila, nada de choques desde
la izquierda con el Gran Hermano PSOE/PRISA, como sí han hecho webs tipo
INSURGENTE o REBELION, o libros y artículos aparecidos en los medios
abertzales, incluído el propio libro de Gª Viñó-, en su doble lenguaje
orwelliano –directamente sacado del libro de estilo de EL PAIS: hablo, claro,
del fáctico y real, no del oficial y meramente retórico que se vende en Crisol-
y, ya con resabios paroxísticos, en los coqueteos de Galactus con la madre del
cordero, tanto en su breve experiencia en el canal polanquiano LOCALIA como en
su blog anidado en pleno corazón de PRISA -¿no había otros sitios donde anidar
su blog?: esto sí es auténtica polancofilia-). Me parece muy bien que se
gayolen con don Jesús del Biopoder y su universo, pero al menos que lo admitan,
que no se las den de libertarios, puretas, independientes de la política
establecida, etc. Yo, cuando estaba en “ABC”, simpatizaba con AP y nunca lo
negué ni lo disfracé (incluso dije en varias ocasiones que, si Ansón me había
invitado a colaborar, fue por ser el único de la movida que públicamente había
mostrado sus simpatías por el partido que apoyaba ese diario).
Pero la comparación más llamativa
está (porque ahí se ve claramente cómo han asumido el estilo de la casa) en su
manera de enfocar lo vasco. MB es a lo vasco como PRISA a lo yankee. Si estos
gustan de jalear y justificar en su faceta más epidérmica (titulares, extractos
audiovisuales, programas de humor, guiñoles, etc) los desplantes de ZP a los
USA, su Alianza de Civilizaciones y los guiños pseudocómplices a Castro y a
Chávez, sus choques con el bushita Aznar, etc, en tanto que, en el fondo,
sabotean todo ello con los artículos más serios (ya saben, el ahora en serio
que viene después del chiste) y sentando cátedra de Mario y Alvarito Vargas
Llosa, de tal o cual halcón laborista israelí, de tal o cual asesor y/o
presidenciable usaco, con las noticias destacando las perversidades de Castro o
Chávez o los islámicos, con las columnas de sus sicarios abjurando de sus
pasados excesos progres (recuerdo una, sin absoluto desperdicio, de la inefable
Rosa Montero polemizando con Angela Davis por las simpatías castristas de la
pantera negra), con las defensas absolutamente fundamentalistas del neoliberalismo
más duro a través de sus páginas económicas, etc.
En MB ocurre lo mismo con el tema
vasco. Más allá de esa gracieta de la mesa nacional de MB (hoy
convertida, por cierto en mesita plegable donde sólo parecen caber Galactus y
su fiel esclava Vicky –Chechu, en la caseta, vigilante, por si los cacos-), es
interesante acercarse a los vascos irreductiblemente entregados a MB, como
Alejo Alberdi (amigo del alma de Galactus) y Xabi Ben Puta. En el caso de
Alejo, su fobia antiabertzale es ya tan conocida en los ambientes bruttos como
la fobia contrarrevolucionaria de Vargas Llosa en cualquier ambiente. Según
creo entender, todo procede de cuando ETA se cepillaba narcotrapicheros
confidentes de la pasma (esa figura tan entrañable para la estética brutta de
Huggy Bear, el negrata saleroso de STARSKY Y HUTCH), algo que Alejo considera
imperdonable (supongo que por algún impulso de solidaridad corporativa con un
oficio tan noble como es el de dealer). Lógicamente, como esto no queda
muy ético, ha de disfrazar su discurso con una retórica humanista y de
santa indignación que acaba por ser absolutamente gemela de la que puede usar
la AVT (de hecho, dijo en una entrevista estar próximo a BASTA YA, otro
colectivo de la cuerda). Es bastante gracioso que MB se ría del PP, de Alcaraz
y de la COPE y sintonice tan bien con alguien que parece odiar a ETA y a su
entorno tanto o más que el PP, Alcaraz y la COPE juntos. Es muy enjundioso
recordar cómo las simpatías proabertzales expresadas en mi artículo sobre la
Movida que apareció en MB encabronaron de tal modo a Alejo que no paró hasta
conseguir que Galactus, con su espada flamígera, me expulsara del Edén brutto:
al menos, es una de las coartadas en que se escuda el cebolletil y frustrado
aprendiz de Polanco.
En cuanto a Ben Puta, sin llegar
a los extremos de Alberdi, en su blog he detectado malestar con respecto
a la coerción abertzale. ¿Un malestar libertario? ¿Tal vez
barojiano? ¿Acaso anarcoindividualista, stirneriano? Desde luego, no se le ve
muy contento con ese proceso de paz que alienta ZP y su recua. Y esto vuelve a
ser contradictorio porque ¿acaso no es ZP y su partido, y los medios que lo
apoyan, lo mejor dentro de lo que hay, y el único bastión contra la bestia
pepera, copera y auvetera que tanto detestan los bruttos? ¿No deberían entonces
tanto Alberdi como Ben Puta tener una versión más evangélica y ghandiana, como
la tiene ZP, de los abertzales?
Ya he hablado de la coartada que
usa Galactus para referirse a mi expulsión. Pero es también sintomático que la
otra persona proabertzale que había entre los colaboradores (Dildo de Congost,
fan por entonces de Jarrai y de todo aquello que oliese a Jarrai en otras
autonomías, como sus paisanos de las Mocedades Independentistas: hoy, como yo,
está más desencantado pero siempre, lo mismo que yo, se sentirá más cerca de
los impulsos de liberación nacional vasca que del cipayismo españolista
disfrazado de angustia democrática ante la barbarie de los violentos o
de malestar libertario ante la coerción independentista) también acabase
chocando y perdiendo la sintonía con la mal llamada (salvo en contralenguaje
orwelliano o en coña) mesa nacional de MB.
Si algún berzotas de
Euskalherría, en algún momento, creyó que MB y el MLNV casaban (tal vez Dildo y
menda, en nuestro paso por la publicación, tuvimos algo de culpa al defender
posturas en absoluto compartidas por el resto), creo que a estas alturas queda
claro que no. Lo mismo que ningún lector mínimamente avisado puede creer que
Polanco y su emporio son críticos al imperialismo norteamericano y al mercado
mundial impuesto por éste.
THE NAKED KISS
ELDERLY:
Ayer tuve
ocasión de videar UNA LUZ EN EL HAMPA, de Samuel Fuller (mojigata traducción
franquista del título original, THE NAKED KISS -1964-). Quedé realmente fascinado.
La cinta arranca con una impresionante Constance Towers con la cabeza rapada
dando una soberana paliza a un hombre. La escena es de una arrebatadora
modernidad violenta (parece que Fuller ató las cámaras a los protagonistas para
conseguir primeros planos muy vivos). Escaso presupuesto y una modesta
escenografía pulp, pero enaltecida por miss Towers, de quien me declaro fan
fatal desde ya. Una señora con un cuerpo aristocrático capaz de repartir leña
con trajes de cocktail elegantísimos. Sólo Linda Fiorentino, también muy
ponderada por Herr Maledetto, fue capaz de hacer algo semejante en nuestros
días.
Y todo con una
denuncia de la sórdida mesocracia provinciana de EE.UU. con su atroz
fariseísmo, al estilo de James Ellroy, con una trama pedófila en medio de la
campante corrupción humana. Al final, la chica venida de los márgenes resulta
ser el único personaje ético del conjunto. Parece ser que Fuller censuró la
escena final de tres minutos en las que aquélla mandaba al infierno a todos los
paletos.
···
MALEDETTO:
Mmmm...Constance Towers.
¡La prefiero mil
veces a la Fiorentino!
Seguro que no se
ha dado cuenta, Herr Elderly, pero la ha visto mil veces como guest star en las
series más exitosas de TV. Se ha escrito un crimen, MacGyver, Frasier...también
en otras más casposas. ¡Qué duro es ser actor de minorías!
En cuanto a Sam
Fuller, eso sí era Hollywood.
Aparecía en sus
filmes de modo más misterioso y sutil que Hitchcock (en una foto en la pared
con su inseparable cigar, en la portada de un libro suyo...).
La peli que
usted cita (una barbaridad) viene en un pack junto a la anterior, "Shock
Corridor" cuya protagonista es también la sinpar y explosiva Miss Towers,
en el papel de una strip teaser. Otro oscuro filme con sabor a broken dream
sobre insituciones mentales, mucho más duro e impactante que el famoso de Milos
Forman. Hace poco las compré en amazon por unos pocos dólares. Voy a conseguir
pronto otra con aparición sublime de Miss Towers, esta de más empaque:
"The Horse Soldiers", la última del tándem Ford/Wayne.
TODOS LOS OSOS TIENEN SU OCTAVA (A
VUELTAS CON “GRIZZLY MAN”)
HUBERT:
Con
bastante retraso pero, por fin, la ví ayer.
Aún
conmocionado, la mirada a la naturaleza es tan tétrica ("esos ojos del
oso que solo buscan comida, sin ninguna complicidad con el hombre"),
tan profunda, que no puede dejar indiferente. La naturaleza como banquete
cruel, al estilo de Castaneda, y el "iluminado" como
demostración palpable del resultado de la muerte de Dios y su fallida
reencarnación en el delirio.
Las
escena en que Herzog se pone los auriculares conectados a la cámara de video es
una de las más poderosas que he visto jamás en cine.
O
uno de los guardianes en el parque, “los osos no se lo comieron antes porque
pensarían que le pasaba algo".
No
hay que perdérsela.
WELCOME,
MONSIEUR TIFFAUGES
MONSIEUR TIFFAUGES:
Hola de nuevo a todos,
Echaba mucho de menos el foro.
Os cuento algunas de mis primeras impresiones al volver a España.
Acabo de leer un artículo de
Momus sobre un uso sorprendente que la gente le ha encontrado a Myspace. Muchos
de los usuarios que tienen un perfil en la página han fallecido y sus páginas
se mantienen activas. Eso no es especialmente sorprendente. Tampoco lo es que
exista una página (Mydeathspace) donde se recopila a los usuarios fallecidos de
Myspace (algunos de ellos asesinos; con frecuencia las víctimas y los asesinos
de un mismo caso policial comparten espacio en la fantasmagoría que es
Myspace). Lo interesante es que los amigos de los difuntos siguen dejando
comentarios a los muertos en sus perfiles, en una actualización pálida de los
antiguos altares consagrados a los muertos. En ocasiones los fallecidos se
comunican periódicamente con sus conocidos a través de mensajes generados
automáticamente por Myspace (recordatorios de cumpleaños, por ejemplo). La
modernidad (y su deterioro) es, como recuerda Calasso, un extraño arcaismo.
Momus habla de los fantasmas y de myspace, entre el bochorno y el asombro:
"Imagine
dying for real, dying physically, but lingering on as a digital ghost, a
presence on a MySpace page collecting obituaries and tributes. It's already
happened to quite a few MySpace users. A website called MyDeathSpace, for
instance, collects dead MySpace users' pages. It has over a hundred, and adds
more each day."
"The
sad fact is that more and more of us, as we invest ourselves in the web,
entrusting intimate personal information to garish pages, are destined to leave
hastily-constructed, poorly-designed memorials online when we die, trivial
shrines whose guest books and comments sections will continue to grow even as
we rot, puffing up slowly with hackneyed, repetitive, ghoulish, unintentionally
funny tributes."
Tuve la oportunidad de ir a un
concierto de Momus este mes y lo disfruté como un niño. Me pareció el trickster
de los cuentos. Filtrado por su talento todo parecía válido: parodias dedicadas
al Bowie crepuscular ("Zanzibar", de su último disco, "Ocky
Milk", que os recomiendo), guiños obsesivos a Japón, canciones de trovador
barroco, o incluso un himno en italiano dedicado a la dolce vita
("Giapponese a Roma"). Hay algo en Nick Curry/Momus que me recuerda a
Fernando, una relación misteriosa, basada en una antítesis radical. De Nick
Curry se ha dicho que es abierta y declaradamente posmoderno. Su pasión por el
barroco y los libertinos empolvados contrasta abiertamente con la alergía
infantil, casi física, de Fernando al bizantinismo rococó, que es embustero
siempre con la Naturaleza. En otros muchos aspectos la colisión entre ambos
sería frontal. Hay, sin embargo, parecidos. El interés por Japón y el
sintoismo, la producción sorprendente y continuada de artículos y manifiestos
con un diseño lofi (véase http://imomus.com/thoughtsindex.html),
la intuición de que internet puede ser un luminar con el que se puede tener una
relación visionaria, y, sobre todo, la idea de que el músico pop es una anomalía
inquietante que trasciende lo musical y se aventura en el pensamiento. Dejo las
coincidencias en el aire para quien quiera pasarse por su web y explorarla.
Maravilloso el aturdimiento de
Zapatero ayer (calculado o no), ese torpor de rumiante al responder,
verdaderamente terrorífico, que revelaba lo irreal de su esfuerzo político.
Lobo Antunes decía que sólo hay dos tipos de persona a los que no daría nunca
la mano, los políticos y los pedófilos. Muchos pedófilos, sin embargo,(y me
refiero a los que pueden ser aislados de una masa embrutecida, animal e
irrecuperable) sí merecen respeto, en su condición de víctimas de cazas de
brujas y pánicos morales vigentes (el propio Momus tuvo serios problemas cuando
pretendió casarse con una adolescente) y como herederos lejanos del Satán de
Milton, maravillosamente descrito por Mario Praz, representantes la rebeldía
más pura. Ya se ha hablado con frecuencia en la web del potencial subversivo de
las perversiones que aún no han sido admitidas y fagocitadas. Quizá habría que
decirle a Lobo Antunes que dispense a algunos pedófilos y concentre todo su
desprecio en los políticos. La clase política occidental vive en un estado de
sonambulismo prodigioso. Se le podrían aplicar las claves decadentes que
detectaba Praz en la pintura de Moreau: la belleza de la inercia (el sopor
sonámbulo, el torpor, el trance) frente al movimiento libre y natural y la
necesidad del artificio (Salomé cubierta de pedrerías o, en nuestro caso, las
circunvoluciones inútiles, como volutas de humo, del discurso de ZP).
Y el año no ha hecho más que
empezar...