DETRAS DE LAS RISAS

 

 

 

 

 

 

 

«La risa, instrumento de la alegría humana. Aprende a usarla como arma de destrucción. Conviértela en una burla. Es sencillo: dí a la gente que se ría de todo. Dile que el sentido del humor es una virtud ilimitada. No dejes que quede nada sagrado en el alma del hombre, y su alma no será sagrada para él. Mata la adoración y habrás destruido lo heroico del hombre. Uno no reverencia con una risa tonta. Obedecerá y no pondrá límites a su obediencia: todo está permitido, nada es demasiado serio.»

(EL MANANTIAL, de Ayn Rand)