CONFLICTO DE INTERESES

nuevas consideraciones intempestivas de Andrea Byblos

En los últimos tiempos la actualidad parece como un río desbocado que fluye inundando áreas y desplazando residentes. Es difícil posicionarse cuando la posición va a ser movida en cuestión de segundos. Tiempos de contradicciones, de ideologías que no casan con la realidad, de seguir unas corrientes que inundan e inundan sin control, sin que haya un plan hidrológico en condiciones o una canalización medianamente decente.

Nos encontramos con situaciones tontimodernas que van a choques de trenes de una forma muy estúpida, sin que haya una moderación o un término medio por parte de los que se toman el objetivo de asumir el liderazgo y se encomiendan a decidir qué debemos hacer los demás..

Hace poco la Seguridad Social Inglesa hizo público que pagará los gastos de la gestación subrogada para parejas de hombres homosexuales que, evidentemente, por sus propios medios no pueden ser padres.

Una mujer que hace una gestación subrogada está usando su cuerpo y su salud, mediante pago de dinero, en beneficio de otros con más dinero, lo cual se parece mucho a la esclavitud. Que esto llegue a pagarlo la Seguridad Social Inglesa pretendiendo que es para la Igualdad de derechos en la paternidad para parejas homosexuales de hombres indica hasta qué punto la corriente del río se ha desbocado en un sinsentido. Pero al ser esclavitud para parejas de homosexuales que, actualmente, están en lo alto de la pirámide en cuanto a superioridad moral se refiere, correremos un tupido velo rosa. ¿Hablarán las feministas? Algunas lo han hecho, pero con poco predicamento porque hay que ver qué superioridad moral es superior a otra.

En una famosa universidad inglesa han establecido una hora de gimnasio “libre de hombres”. Es una hora, en la que sólo pueden acudir mujeres y personas de género no binario. Entiéndase no binario como el ser que un día se siente hombres, otro mujer, otro no se sabe y otro mesa camilla con brasero y tapete para jugar al tute. Eso es para evitar que los hombres del heteropatriarcado observen a las mujeres y los seres no binarios con lascivia mientras hacen sentadillas. Si a los hombres se les ocurriera lo mismo para evitar que las mujeres y los no binarios los observasen con lascivia me pregunto qué sucedería, si harían resucitar a Churchill para que salvara Inglaterra de la que se iba a armar. Aunque, ya puestos, deberían hacer sesiones individuales porque puede haber mujeres que observen con lascivia a otras mujeres y hombres que observen con lascivia a otros hombres y éstos y éstas también se pueden sentir ofendidos, así como los no binarios si son observados por otros no binarios mientras sudan sudor no binario.

Lo siguiente sucede también en la Pérfida Albión, de donde proceden muchas teorías y modas modernas. También en otra universidad las feministas decidieron cambiar los géneros en el lenguaje, sustituyendo el femenino y el masculino por una X. Eso cabreó a los transexuales, que después de gastarse miles de libras en operaciones y papeleo para por fin ser consideradas como mujeres con todas las letras, les quitaban la partícula femenina de su adorado nuevo género.

También en la Pérfida Albión, padres y madres musulmanes han comenzado a protestar y manifestarse por un programa que se da en las escuelas de primaria para la “igualdad entre los sexos” que habla de aceptar la homosexualidad como algo normal. Hablan de un adoctrinamiento intolerable, y dicen, que si siguen así, se vuelven a su país para enseñar los verdaderos valores.

Son sólo unas cuantas noticias leídas en ratos libres, pero que dan una idea de los conflictos de intereses que se están fraguando en todo este lío tan fluido, no binario, donde se juega uno el triangulito de arriba en la pirámide de la superioridad moral (y eso que no he metido a los veganos en la ensalada). En todas esas poses tan progres y tan guays que no se han pensado con la cabeza, sino con el modo “cool” del bulbo raquídeo, hay conflictos de intereses. Hay que discernir quien va primero, si las feministas, si los transexuales, si los homosexuales, si los inmigrantes musulmanes. Todos ellos entran dentro de lo cool que las ideologías progres defienden, pero parece que los intereses de los homosexuales en la paternidad no casan con el feminismo, que los intereses de las feministas no casan con los de los transexuales, que los intereses de los inmigrantes musulmanes no casan con los de los homosexuales, feministas, transexuales y demás. Supongo, que van a tener que hacer una carrera para ver quien llega antes a la cima de la superioridad moral y gana, pero está muy reñido, hay mucha competencia.

Mientras tanto, y esperando el próximo capítulo de greguerías fluidas tontimodernas corramos un tupido velo tipo burka de color rosa y morado, con un arcoíris como símbolo de la paz entre los pueblos.